Historia

La historia de los GTS se remota al 904 Carrera GTS

Todos los modelos GTS de las diferentes series de Porsche tienen una característica en común: se cuentan entre los vehículos más deportivos, más emocionales y con la mayor dinámica de conducción de su segmento. En 2015, la variedad de modelos GTS abarcó, por primera vez, cinco series de modelos en nueve variantes distintas: con dos o cuatro puertas, con techo fijo o descapotable, con caja de cambios manual o cambio PDK. En el nuevo 718 GTS 4.0 se cruzan dos cadenas de ADN históricas de Porsche. A nivel conceptual y de diseño, la familia de deportivos de dos puertas recoge elementos de los emblemáticos coches de carrera con motor central 550 Spyder (1953), 718 GTR Coupé (1962) y 904 Carrera GTS (1963); sus formas y proporciones encuentran una interpretación moderna en el 718 Boxter y Cayman. A la vez, el Carrera GTS, diseñado por Ferdinand Alexander «Butzi» Porsche, que ni tan solo se podía llamar oficialmente 904 por motivos de la protección de marcas, es considerado como el antepasado de la línea GTS de Porsche.

Pero en un primer momento, la abreviatura que significa Gran Turismo Sport volvió a hacer historia en el ámbito de las carreras, adornando la amplia trasera del 924 Carrera GTS de 1980. La serie de evolución ligera con un peso de 1121 kilogramos del 924 Carrera GT con motor turbo de dos litros, limitada a 406 unidades, tenía una potencia de 245 CV y alcanzaba una velocidad de más de 250 km/h. Para los 50 ejemplares destinados al uso en carretera se aplicó un procedimiento de homologación individual. El modelo también se fabricó en una versión destinada puramente al circuito de carreras con una potencia de 375 CV, así como una variante de rally de 280 CV. El coche de rally con el que Walter Röhrl causó sensación en 1981 en el Campeonato alemán fue nuevamente un 924 Carrera GTS Rallye, desarrollado en Weissach específicamente para este fin. 

En la actualidad, la sigla GTS corresponde al modelo universal deportivo de cada serie, lo cual lo diferencia frente a los vehículos de alto rendimiento y GT. En este sentido ya se presentó el 928 GTS en el año 1992. Poseía un motor de 5,4 litros, ocho cilindros y cuatro válvulas, con el cual el deportivo Transaxle alcanzó el cénit de su historia de modelos. Proporcionaba una potencia de 350 CV y se podía combinar con un cambio manual de cinco velocidades o un cambio automático de cuatro velocidades. El 928 GTS realizaba el sprint de 0 a 100 km/h en menos de seis segundos y alcanzaba una velocidad máxima de 275 km/h. Con él finalizó en el año 1995 la historia de la serie 928.

Doce años después, en 2007, el Cayenne GTS con motor V8 atmosférico surgió como patrón para muchos otros modelos GTS de Porsche. Su potencia de 430 CV y un chasis con una configuración más rígida dieron a este modelo de cuatro puertas un plus de deportividad. Un equipamiento con numerosos elementos de diseño de color negro y un sonido adecuado resaltaban su presencia. Lo mismo se aplicaba también a partir de 2012 para el modelo sucesor del Cayenne GTS. Con 309 kW (420 CV) volvió a ser más potente que ningún otro modelo de motor atmosférico de SUV deportivo en su época.

En 2010 salió, por primera vez, un 911 Carrera GTS. Con una potencia de 300 kW (408 CV), actuó como un nexo de unión entre los modelos Carrera, Turbo y GT de la generación de 911 997. Estaba disponible como coupé y cabriolet, así como con tracción trasera y total, pero siempre con la carrocería ensanchada en 44 milímetros de la variante S. Incluso entonces, el labio del spoiler frontal esmaltado de color negro y las mordazas de freno rojas formaban parte de las características visuales. Otra particularidad: sus llantas de aleación de 19 pulgadas poseían un cierre central, tal como se utiliza también en el deporte de competición. Siguiendo el mismo principio, Porsche ofreció a partir de 2014 también para la generación 991 un 911 Carrera GTS, que estaba disponible como coupé y descapotable, así como, por primera vez, como Targa. La potencia de su motor bóxer de seis cilindros y 3,8 litros aumentó a 316 kW (430 CV).

La tercera familia de modelos que Porsche enriqueció con una variante GTS fue, en 2011, la berlina deportiva Panamera. En primer lugar, un motor V8 de 316 kW (430 CV) y 4,8 litros en combinación con el cambio PDK de siete marchas aseguró el temperamento deportivo y la velocidad máxima de 288 km/h. El Panamera GTS con tracción total cerró el hueco entre el Panamera S de 380 CV y el Panamera Turbo de 500 CV. Tras la actualización del producto, la potencia aumentó a 324 kW (440 CV). Desde 2018, el Panamera GTS de la segunda generación de modelos está disponible con un motor V8 biturbo de cuatro litros. Transmite 338 kW (460 CV) a las cuatro ruedas de tracción y propulsa, además del Panamera GTS, también el Panamera GTS Sport Turismo.

En 2015 la familia Macan fue ampliada por primera vez con una variante GTS. Con 265 kW (360 CV), un chasis más rígido y una velocidad máxima de 256 km/h, se estableció como la versión de serie más deportiva del compacto SUV. Ahora llega el modelo sucesor, con prestaciones mejoradas en todas las dimensiones.

Un año antes, en 2014, la filosofía GTS ya alcanzó al Porsche Boxster descapotable y al coupé Cayman. Por primera vez desde el Porsche 904 Carrera GTS volvió a distinguir así a un deportivo con motor central de la marca. Con su motor bóxer de seis cilindros y 3,4 litros con una potencia de hasta 250 kW (340 CV), en combinación con el cambio de doble embrague Porsche PDK, los biplaza aceleraban de 0 a 100 km/h en 4,9 segundos y alcanzaban unas velocidades máximas de entre 281 y 285 km/h. En el modelo sucesor, a partir de 2017, latía inicialmente un corazón turbo: El Porsche 718 GTS se presentó en la línea de salida con un motor turbo de cuatro cilindros y 2,5 litros. En 2020, el 718 GTS 4.0 abrió el siguiente capítulo en la historia de los GTS de Porsche con un motor atmosférico de altas revoluciones de seis cilindros y una potencia de 294 kW (400 CV). La variante turbo se mantiene en la oferta para el mercado chino.



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