El corazón del Porsche late directamente detrás del conductor: el motor bóxer de seis cilindros, con aspiración libre y una cilindrada de 4,0 litros, está instalado entre los dos asientos y el eje trasero. Esto convierte al nuevo 718 Cayman GT4 RS en el deportivo más potente de la historia de la popular serie de motores centrales. 500 CV (368 kW) de potencia a 8.400/min, 450 newton metros de par motor a 6.750/min y un régimen máximo de 9.000/min son características que, por lo general, solo se dan en los coches de carreras. Y, de hecho, este motor se utiliza en las carreras de coches: en la Porsche Mobil 1 Super Cup, el Porsche 911 GT3 Cup compite con el mismo grupo motor y con unos datos de rendimiento casi idénticos. Y también el modelo 911 GT3 homologado para carretera está equipado con este motor de altas revoluciones. El motor aspirado está ávido de aceleración y en tan solo 3,4 segundos catapulta al Porsche 718 Cayman GT4 RS a los 100 km/h. La marca de los 200 se alcanza tras 10,9 segundos y la propulsión llega hasta los 315 km/h. El consumo medio de combustible es de 12,3 l/100 km según el NEDC o de 13,2 l/100 km según el WLTP.
Tecnología del motor derivada directamente del automovilismo de competición
El motor del GT4 RS es un excelente ejemplo de transferencia de tecnología del automovilismo de competición a la producción en serie. Las 24 válvulas del motor de seis cilindros se accionan mediante bielas de arrastre rígidas que no requieren una compensación hidráulica del juego de válvulas. Esto garantiza la robustez del tren de válvulas incluso en las condiciones más duras, es decir, incluso cuando se utiliza con frecuencia el nivel más alto de velocidad. Además, la acreditada tecnología VarioCam garantiza que el ajuste del árbol de levas se adapte exactamente al régimen del motor y al estado de carga.
La idea de la válvula de mariposa individual también procede del automovilismo de competición. Cada uno de los seis cilindros tiene su propia válvula de mariposa al final del sistema de aspiración de resonancia variable. Esta válvula se aproxima mucho a las válvulas de admisión, mejorando así el suministro de aire y la dosificabilidad, con la consiguiente mejora de la respuesta del motor. Como apenas hay aire entre la válvula de mariposa y las válvulas de admisión, el motor responde a las órdenes del pedal sin apenas retardo, lo que se aplica igualmente a la apertura y al cierre del acelerador. La válvula de mariposa central permanece como solución de reserva, pero está permanentemente abierta durante el funcionamiento normal.
En vista de la elevada aceleración longitudinal y transversal que genera el nuevo 718 Cayman GT4 RS, la alimentación de aceite al motor de altas revoluciones adquiere una importancia especial. Al igual que en el automovilismo de competición, esto se gestiona mediante un sistema de lubricación por cárter seco con un depósito de aceite separado. Con un total de siete etapas de aspiración, este sistema conduce el aceite del motor rápida y eficientemente al depósito externo de reserva, mientras que la lubricación de los cojinetes de biela, sometidos a grandes cargas, tiene lugar directamente a través de la bomba de aceite por medio del cigüeñal.
Innovadora conducción del aire de proceso
En lugar de las dos ventanillas laterales traseras, el 718 Cayman GT4 RS cuenta con aberturas de admisión adicionales para suministrar aire de proceso al motor. El aire llega por los lados izquierdo y derecho, sin desviarse, a una caja de aire central situada detrás del conductor y visible desde el exterior a través de la luneta trasera. El resultado es no solo un aspecto especialmente deportivo, sino también un sonido de motor claramente perceptible para el conductor y el copiloto a la altura del oído. El paisaje sonoro, que varía mucho en función de la carga y del régimen del motor, se completa con el sistema de escape deportivo de acero inoxidable en construcción ligera, que reproduce el característico sonido bóxer del motor, especialmente a altas revoluciones. El GT4 RS cumple además con la actual norma de gases de escape Euro 6. Dos filtros de partículas (OPF) separados y una regulación lambda estéreo para los dos catalizadores se encargan de funciones cruciales de purificación de los gases de escape.
Caja de cambios PDK optimizada con muchas opciones manuales
Como todos los modelos RS modernos, el nuevo 718 Cayman GT4 RS también está equipado exclusivamente con la transmisión Porsche de doble embrague (PDK). Gracias a ella es posible cambiar de marcha como en las carreras: en milisegundos y sin interrumpir la fuerza de tracción. En el GT4 RS, la PDK tiene siete marchas con desmultiplicación corta y no tiene función de sobremarcha. La velocidad máxima se alcanza en la séptima marcha.
En el modo PDK Sport, las reducciones de marcha al frenar son claramente más espontáneas y más audibles; al acelerar, los puntos de cambio a una marcha superior se desplazan a regímenes más altos. Si no se quiere dejar el cambio de marcha a merced de la electrónica de a bordo, también se puede cambiar de marcha mediante las levas de cambio en el volante. La leva derecha es la encargada de aumentar la marcha y la izquierda la encargada de reducirla. Los puntos de presión proporcionan al conductor una respuesta precisa incluso si lleva guantes de competición. Además, un selector de cambios situado en la consola central permite cambiar de marcha de forma secuencial. La palanca fue tomada del actual 911 GT3 y tiene la imagen de una palanca de cambios manual con fuelle de cambio de marchas. Como es habitual en el automovilismo de competición, para aumentar la marcha se tira de la palanca hacia atrás y para reducirla, se empuja hacia delante.
23,6 segundos más rápido que el 718 Cayman GT4 en el bucle norte
El nuevo 718 Cayman GT4 RS ya ha dejado su huella en el circuito más largo y difícil del mundo. En un vehículo de serie ligeramente camuflado, el embajador de la marca y piloto de desarrollo, Jörg Bergmeister, dio en 7:09,300 minutos una vuelta a los 20,832 kilómetros del bucle norte del Nürburgring.. El GT4 RS completó la versión más corta de 20,6 kilómetros, que había servido de referencia, en 7:04,511 minutos, exactamente 23,6 segundos más rápido que su hermano pequeño, el 718 Cayman GT4. Para proteger al conductor, el deportivo de motor central estaba equipado con un asiento de carreras. Los neumáticos montados eran unos Michelin Pilot Sport Cup 2 R, disponibles opcionalmente. Un notario confirmó el estado estándar y el peso de serie del vehículo.